domingo, 10 de marzo de 2013

Crema de Nutella (relleno para tartas o muffins)

Domingo...el día que más odio en la semana. No se si os pasa lo mismo...pero yo lo suelo detestar bastante y pocos se salvan jaja. Pero en fin...cambiando de tema, os traigo una nueva receta que os puede salvar si no sabéis de qué rellenar una tarta, por ejemplo o un muffin que os ha quedado sosito...o también podéis optar por comerlo a cucharadas, que es una buena opción para un domingo. Sea cual sea vuestra opción, aqui os dejo la receta. Por cierto, con esta cantidad a mi me da para rellenar una tarta de dos capas de bizcocho de 26cm de diámetro y cubrirla por completo.

INGREDIENTES
140g de queso crema (el de untar, tipo Philadelphia. Podéis usarlo desnatado si queréis también)
Un poco más de media taza de Nutella (realmente la cantidad de Nutella no tiene por qué ser exacta, yo suelo poner dos cucharadas y media colmadas de Nutella y equivalen más o menos a eso. También podéis usar otras marcas, que la Nutella está muy cara)
200g de nata líquida para montar (IMPORTANTE QUE ESTÉ FRÍA)
2 cucharadas de azúcar
1 cucharada de esencia de vainilla (opcional)

PREPARACIÓN
Batimos la nata con una batidora eléctrica hasta que esté casi montada, añadimos las dos cucharadas de azúcar y la vainilla y seguimos batiendo hasta montarla por completo. Reservamos.
En otro recipiente mezclamos con ayuda de una cuchada o espátula la Nutella con el queso hasta que queden bien incorporados y de un colorcito marrón claro. 
Incorporamos 1/3 de la nata montada a la mezcla de Nutella y mezclamos poco a poco con movimientos lentos y envolventes hasta que quede todo incorporado. Repetimos la operación con el resto de la nata montada.
Y ahora solo tenemos que usarla donde queramos. En mi caso la usé para rellenar y decorar una tarta de cumpleaños hecha con bizcochos de brownie :P y queda riquísimo. Lo bueno de esta crema es que queda muy bien con cualquier bizcocho y no es muy empalagosa ya que el queso y la nata rebajan bastante el sabor de la Nutella.
Espero que os guste :)



miércoles, 27 de febrero de 2013

Tarta helada de queso y Oreos

Si, lo sé...estoy tardando más de lo normal en actualizar, pero cuando lo hago me gusta que las recetas sean bien ricas y que sean sencillitas...es por eso que me demoro mucho hasta que encuentro alguna receta innovadora que todos podamos hacer en casa sin mucho esfuerzo.
Además...la gripe ha llegado a mi casa, lo que significa que todos andamos medio tocados, en especial mi madre...así que mucho tiempo de actualizar no he tenido.
Hoy os traigo una receta muy rica, que originalmente la saqué de "Cooking with Karma" (una bloguera inglesa en youtube, que tienen auténticas delicias). Le modifiqué un poco las cantidades y los ingredientes, eso sí, y tras un poco de incertidumbre por si finalmente cuajaría o no (es una tarta que no necesita horneado...de ahí mi miedo), al final quedó muy rica y cuajó sin problema.
Os dejo mi receta adaptada:

INGREDIENTES Y UTENSILIOS:
200g de galletas tipo María (yo he usado unas de fibra porque eran las que tenía en casa, es un poco a gusto porque son para la base)
14 galletas tipo Oreo (yo usé una marca blanca, pero saben igual...y ahorras un poquitín)
60g de mantequilla o margarina derretida (más de lo mismo, yo usé margarina porque mantequilla no quedaba, pero el resultado es el mismo)
2 cucharadas de agua caliente
1 cucharada de gelatina en polvo
** Aclaración para la gelatina: yo no tenía en polvo, tenía esas plaquitas que parecen de plastico, así que usé 4 láminas con las instrucciones de la bolsita, aunque recomiendo usar 6, porque a mi me cuajó pero con ciertos problemas...así que si usáis láminas, usad 6 en vez de 4 y así no tendréis problema**
500g de queso crema a temperatura ambiente (yo lo usé desnatado...para ver si sabía igual quitándole un poco de calorías)
200g de nata líquida para montar
180g de azúcar
80 ml de leche condensada
1 bolsita de mini Oreos (estas si las compré originales, porque son para decorar)
Molde redondo desmontable

PREPARACIÓN:
Derretimos la mantequilla y machacamos las galletas tipo María. Mezclamos ambas cosas hasta conseguir una consistencia de arena mojada.
En un molde para bizcocho (de los que se abren, de metal), forramos el fondo con papel de hornear e incorporamos la mezcla, aplastando bien con los dedos de forma que quede una base de galletas sin ningún agujerito por el que pueda pasar la crema que realizaremos a continuación. Dejamos reposar en el frigorífico unos 30 minutos.

Mientras tanto machacamos 14 Oreos (yo machaqué 12 por un lado y 2 por otro, para usar las 2 sobrantes para decorar, pero también podéis machacar todo junto y dejar un poquito para decorar) y preparamos la gelatina según las instrucciones del fabricante.
En un recipiente grande ponemos el queso crema, la nata para montar y el azúcar y mezclamos con una batidora eléctrica (si tenemos, si no usamos unas varillas normales) hasta que todo quede incorporado y con una consistencia cremosa. A continuación, añadimos la gelatina ya preparada y la leche condensada, batiendo hasta incorporar todos los ingredientes. Por último, añadimos las Oreo machacadas y mezclamos bien con una espátula, siempre con movimientos lentos y envolventes para no perder la cremosidad.

Sacamos el molde con la base de galletas del frigoífico y le incorporamos la crema de oreos, le damos unos golpecitos al molde contra la mesa para evitar que aparezcan burbujas y decoramos con las mini Oreos alrededor, formando un círculo y espolvoreando las Oreo machacadas sobrantes por encima.

Refrigeramos durante 6 horas mínimo, pero recomiendo dejarlo toda la noche y sacarlo en el momento de comerlo. Antes de desmoldar, pasamos un cuchillo por el borde para que no se rompa ni se resquebraje la tarta (yo le dejé la base de metal y lo conservo ahí, poniéndole la otra parte del molde cuando conservo la tarta sobrante en el frigo).

Por cierto, un truquito...si queréis que la tarta quede un poco helada, metedla en el congelador entre media hora y una hora antes de comerla (depende de la potencia de vuestro congelador) y quedará fresquita, como un helado.

Espero que os guste!!





lunes, 21 de enero de 2013

El super bizcocho

¡Buenas noches!
Como veis...esto de escribir en el blog me está costando un poco más de lo habitual, pero sigo aquí :) y traigo una receta MUY sencilla, MUY rica y...MUY GRANDE. Claro está que si no os apetece un bizcocho tan grande en casa (es más bien un bizcocho familiar) lo único que hay que hacer es reducir a la mitad todos los ingredientes.

INGREDIENTES 
350g de harina con levadura incorporada
200g de azúcar
2 huevos grandes
250ml de leche (mejor si es entera)
100g de mantequilla 
1/2 cucharadita de sal
1 cucharadita de canela en polvo
1 cucharadita de jengibre en polvo
Ralladura de una naranja (o un limón, aunque yo prefiero naranja en este bizcocho)
50g de pasas
80g de nueces (la cantidad de las pasas y las nueces es a gusto, yo le puse más nueces porque me gustan más que las pasas...pero también se pueden usar otros frutos secos que os gusten)

PREPARACIÓN
Precalentar el horno a 170ºC con calor por arriba y por abajo.
Poner las pasas y las nueces en un recipiente y enharinarlos, esto es necesario para que al incorporarlo a la masa, no queden en el fondo, de esta manera encontraremos pasas y nueces en cada trocito que comamos.

A partir de ahora, recomiendo mezclar todos los ingredientes con una batidora eléctrica para que el bizcocho quede bien esponjoso, pero si no tenéis no pasa nada, solo hay que batir más con unas varillas comunes.

Batimos los huevos con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa, añadimos la leche y batimos un ratito más. Dejamos reposar 10 minutos antes de seguir con la preparación.
Derretimos la mantequilla (puede derretirse en el microondas sin problema) y la incorporamos a la mezcla de huevos junto con la sal, la ralladura de naranja, la canela y el jengibre. Incorporamos todo bien con la batidora.
Finalmente, incorporamos la harina poco a poco, batiendo hasta que la masa tenga una consistencia esponjosa y no tenga grumos. Incorporamos las nueces y las pasas, mezclando con cuidado con una cuchara, incorporando todo bien.

Antes de pasar la mezcla al molde os recomiendo que en la base del mismo, sea redondo o rectangular, pongáis papel especial para horno (yo recordé un círculo del tamaño de la base de mi molde), de esta manera evitamos que se queme la base. También es recomendable, casi imprescindible diría yo, engrasar los bordes del molde con un poco de mantequilla. Una vez hecho todo esto, vertemos la mezcla en el molde y lo metemos en el horno en la leja del centro. (Si os pasa como a mi, que mi horno tiene 4 lejas, lo pongo en la segunda leja empezando por abajo, ya que el bizcocho es bastante grueso y es preferible que le de un poquito más de calor por abajo para que se haga bien, pero el centro es lo ideal).

Horneamos 25-30 minutos sin abrir el horno, una vez pasado este tiempo, abrimos el horno y espolvoreamos un poco de azúcar por encima del bizcocho (esto es opcional, pero le da un toque dulce y crujiente en la parte de arriba del bizcocho). Volvemos a cerrar el horno y horneamos otros 15 minutos más, hasta que al pincharlo con un palillo, este salga seco.

Y listo, lo más importante...esperar a que se enfríe para comerlo, que los bizcochos recién sacados del horno caen muy pesados al estómago y pueden sentar mal.




Bon appétit!

viernes, 28 de diciembre de 2012

Cake Pops

¡Buenas noches!
Y ya que estamos, felíz Navidad y esas cosas...que con la tontería llevo casi un mes sin actualizar el blog. Pero es lo que tienen las fiestas, que hace que procrastinemos sin parar...(procrastinar, qué buena palabra).
Hoy os traigo una receta estupenda para reciclar bizcocho, sí, habéis leído bien, RECICLAR. Y con reciclar me refiero a ese trozo de bizcocho que te ha sobrado mientras hacías una tarta, o esos muffins que nadie come porque son los muffins de la vergüenza...pues en vez de tirarlos, podemos reutilizarlos para hacer unos deliciosos cake pop.
Cake pop hay muchos, de muchos sabores y colores distintos, pero en concreto os traigo la receta de los que más me gustan...que son los rellenos de Nutella (o Nocilla, o crema de cacao...como querais llamarla).

INGREDIENTES Y UTENSILIOS:

Bizcocho preparado (a mi, con dos muffins medianos, me da para 5 cake pops)
1 tableta de chocolate (puede ser con leche o negro, también blanco, pero en caso de usar chocolate blanco posiblemente os haga falta otra tableta más, porque suelen ser pequeñitas, de unos 100g)
Nutella (o nocilla, o la crema de cacao que tengais por casa)
Bolitas de colores, crocanti de almendra, fideos de colores...lo que sea para decorar
Palitos de madera para pinchar los cake pops (yo uso los de pinchos morunos de toda la vida, también se pueden partir por la mitad)


PREPARACIÓN:

Desmenuzamos el bizcocho con las manos en un recipiente hasta que tengamos muchas miguitas de bizcocho, lo más finas que se pueda. A continuación, vamos incorporando cucharadas de Nutella y amasando con las manos hasta que obtengamos una pasta manejable (la cantidad de Nutella es a ojo, yo le suelo echar cucharadas poco a poco hasta conseguir la consistencia deseada...si nos pasamos no pasa nada,  pero es importante no quedarse corto porque si no los cake pops se quiebran al meterles el palito).
Una vez que tengamos la masa manejable, vamos haciendo bolitas del tamaño de las trufas y las metemos en el congelador durante una hora más o menos, hasta que veamos que estén frías y un poco más duras.
Troceamos el chocolate y lo derretimos (para evitar ensuciar de más, yo lo pongo en un recipiente y lo caliento en el microondas a la potencia de descongelar, en intervalos de 30 segundos, mirando como va...hasta que se derrita por completo). Una vez derretido, sacamos las bolitas del congelador.
Pinchamos cada bolita con un palito de madera, la bañamos en el chocolate derretido y le ponemos el decorado que queramos, ya sean bolitas de colores, crocanti...cualquier cosa. Una vez terminada la operación debemos poner el cake pop en algún lugar, de manera que quede recto y dejarlos enfriar(yo los pongo en unos vasitos largos que tengo...aunque reconozco que tengo que hacer maniobras para que no se caigan, lo ideal es usar esas placas que parecen de corcho, que sirven para hacer centros de flores pinchando los tallos en ellas).
Y listo...una vez frío, debe quedaros algo parecido a esto...



miércoles, 5 de diciembre de 2012

¡Sigo aquí!

¡Hola a todos! Algunos de vosotros os preguntareis por qué llevo casi un mes sin actualizar el blog, pues bien, no es por pereza, ni por vagancia, ni por no tener recetas (que las tengo a montones...y ya no se donde meterlas jaja), el verdadero motivo es que estoy enfrascada en un nuevo proyecto. ¡Sí! Estamos en un momento de la vida en la que tenemos que movernos e inventar, reinventar y hacer cualquier cosa innovadora.
En mi caso,  estoy empezando a trabajar con una página en facebook en la cual vendo (o, al menos, lo intento) algunos de los postres que mejor me salen y con los que tengo más práctica. La página se llama "Las Delicias de Ra", pero en la portada he mantenido el nombre del blog, ya que ha sido el comienzo de toda esta andadura repostera (menudos conceptos me invento).


Es un proyecto en el que he puesto toda la ilusión ya que, como habréis podido comprobar, la cocina y en especial, la repostería, es algo que me encanta. Aún es pronto para decir si funciona bien o no, pero por ahora puedo decir que la cosa, al menos, marcha.
Si os apetece entrar a echar un vistazo, pinchad aquí ---> Las Delicias de Ra
Pronto volveré a actualizar el blog con más recetas, pero tenedme paciencia, quiero hacer las cosas despacito, pero bien.
Un saludo a todos y muchas gracias por visitas este humilde blog.

Ra.

viernes, 9 de noviembre de 2012

Magdalena, Muffin, Cupcake...¿son lo mismo?

Hola, hace tiempo tuve una pequeña charla o discusión sobre si una magdalena era lo mismo que un muffin o que un cupcake y la charla acabó con la conclusión de que la palabra "muffin" la usamos los reposteros (no es que yo sea repostera...pero entiendo un poco) para sentirnos modernos...sí, cierto, así acabó. El caso es que todos hemos confundido alguna vez los términos "magdalena", "muffin" y "cupcake" alguna vez, porque, aunque no son lo mismo, son MUY parecidos y eso no podemos negarlo. Es por eso que, de lo poquito que se, quiero explicar algunas de sus diferencias básicas.

La Magdalena
La magdalena es la más común de las tres, es la típica que encontramos en cualquier supermercado y que solíamos desayunar (y aún lo hacemos) por las mañanas antes de ir al cole. Aunque es cierto que tanto la magdalena como el muffin o el cupcake usan los mismos ingredientes para su elaboración, la magdalena difiere de los otros dos en que en lugar de usar mantequilla en su masa, se usa aceite. Otra diferencia es que la masa se suele batir mucho, de esta manera se forman muchas burbujitas en su interior y le da esa consistencia esponjosa típica. Por ese mismo motivo, las magdalenas suelen ser más altas que los muffins o los cupcakes. Sobre el sabor, normalmente suelen tener todas un sabor parecido, como el de un bizcocho y no suele variar demasiado.
(Aclaro que la foto la saqué de internet porque no tengo ninguna foto de una magdalena hecha por mi misma).




El Muffin
Los muffins, por el contrario, son un poco más elaborados que la magdalena. Si hubiera un ranking de dificultad en la elaboración, el muffín se encontraría justo en el medio. Al contrario que las magdalenas, para elaborar los muffins se busca batir la masa lo menos posible para que no entre aire, es por eso que los muffins son mucho más compacto y no suben tanto como las magdalenas, suelen quedar chatitos. A la hora de hornear hay que tener ojo ya que si la temperatura es muy alta los muffins subirán demasiado rompiendose un poco por arriba y si, por el contrario, la temperatura es muy baja, quedarán hundidos...eso es algo que  yo aprendí tras varias tandas de muffins (no es que sea algo muy importante, pero siempre suele gustar que nos quede bonito lo que hacemos). Sobre los sabores, admiten muchos variantes y los hay incluso salados, esto se debe a que un muffin siempre lleva incluído en su masa algún ingrediente extra ya sean pepitas de chocolate, frutos secos, trozos de fruta, especias o, como he dicho anteriormente, algunos ingredientes salados como queso o incluso, bacon.
(En la segunda foto, pongo de ejemplo unos muffins que se me hundieron un poco...).




El Cupcake
Un cupcake es, básicamente, una mini tarta. Es un muffin dulce (siempre dulce) decorado de mil maneras posibles, es por eso que puede llegar a ser el más complicado de los tres, ya que hay algunos decorados de cupcakes maravillosos y muy complicados. En su masa utiliza mantequilla, al igual que el muffin y puede estar relleno con casi cualquier cosa dulce que podamos imaginar, pero lo importante, como ya he dicho, es que está siempre decorado en su base.
(En el caso de la foto, lo decoré con buttercream tintada con colorantes, virutas de colores y un lacasito arriba...pero se puede hacer de cualquier manera, la imaginación es libre en el caso de los cupcakes).


Como veis, no es que sea una experta, pero conozco las diferencias más básicas y me apetecía mucho contarlas en el blog. Aún así aún tengo mucho que aprender y seguro que más de uno puede aportar algo a las explicaciones que acabo de dar. 
¡Hasta la próxima!

miércoles, 31 de octubre de 2012

Muffins de canela y jengibre

Dije que iba a hacer galletas...pero resulta que me faltaba un ingrediente importante así que no me he podido quedar quieta y he decidido innovar. Para mi innovar es modificar una receta que ya conozco con algunos ingredientes extra para ver qué tal sale. A veces sale un churrito...y a veces, como hoy, salen pequeñas delicias. Os aconsejo fervientemente que, si teneis tiempo, prepareis los muffins que os digo a continuación porque, además de fáciles, están buenísimos y son super ligeros.

INGREDIENTES Y UTENSILIOS:
125g de mantequilla (reblandecida a temperatura ambiente)
125g de azúcar
2 huevos grandes batidos
125g de harina integral con levadura incorporada (podeis usar harina normal, siempre con levadura incorporada, pero el hecho de que sea integral le da ese toquecito y ligereza que os digo)
2 cucharadas de leche
1 cucharadita de esencia de vainilla
1 cucharadita de canela en polvo
1/2 cucharadita de jengibre en polvo (es la primera vez que lo uso y le ha dado un toque estupendo, en Mercadona lo venden, sección de especias!)

Para decorar:
Corazones de colores
Virutas de colores
Azúcar glass
(Lo que querais...básicamente, yo he dejado algunos sin decorar, otros con azúcar glass y otros con corazones de colores)

Utensilios:
Batidora eléctrica (se puede hacer a mano, pero con la batidora es más rápido y le da más esponjosidad)
Moldes para muffins de papel (a mi me han salido 12 y el tamaño es mediano)

PREPARACIÓN:
Antes que nada, ponemos a calentar el horno a 150ºC, con calor por arriba y por abajo y colocamos los moldes de papel en una bandeja para horno (si teneis moldes de silicona o de metal para muffins, mejor que mejor, porque al meter el papelito dentro no se deforman, pero si no teneis no pasa nada, como mucho pueden salir un poco deformes pero...lo importante es que estén ricos).
En un recipiente grande batimos la mantequilla junto con el azúcar hasta conseguir una consistencia suave y cremosa. A continuación, añadimos una cucharada de harina (de los 125g que tendremos ya preparados), batimos un poco y añadimos los huevos batidos. Lo de añadir harina antes de los huevos se hace para evitar que la mezcla cuaje. Batimos todo hasta que los ingredientes queden bien integrados.
Añadimos las dos cucharadas de leche, la esencia de vainilla, la canela y el jengibre y volvemos a batir hasta integrarlo todo bien.
Finalmente, agregamos la harina en dos tandas, batiendo entre tanda y tanda hasta que no queden grumos (nromalmente, al hacer muffins, es conveniente mezclar la harina con una espátula sin batir, pero hoy me apetecía batirlo todo porque cuanto más bates, más esponjosos y ligeros salen los muffins así que eso he hecho y el resultado es buenísimo).
Con ayuda de dos cucharas, vamos repartiendo la masa por los moldes a partes iguales, siempre intentando no sobrepasar 3/4 partes del molde porque si no, como me ha pasado a mi justo hoy en dos de los muffins en los que me he pasado con la masa...se sale todo y quedan muy deformes y horribles jajaja.
Los ponemos a hornear en el centro del horno, unos  30-40 minutos, pero todo depende de tu horno así que lo mejor es ir mirando (SIN ABRIR EL HORNO!! QUE SI NO SE BAJAN!!) y cuando veamos que están doraditos por arriba, con aspecto de magdalena subida y hecha...abrimos el horno, le introducimos un palito en el centro y si sale seco, los sacamos.
Una vez fríos (IMPORTANTE, FRÍOS!!) los decoramos como queramos, en mi caso ha sido con corazones y con azúcar glass pero aquí lo que manda es la imaginación. (Vereis que los muffins adquieren un color oscurito, como si llevasen chocolate, gracias a las especias).





Bon appétit!!